Overpopulation, pollution, global warming are obvious and pressing problems on our planet, so finding and enjoying places where these inconveniences have hardly caused changes is a gift that we must take advantage of while we can.
This week concludes I had to travel for an important issue that my son delegated to me, I went to supervise the leveling of a lot and the construction of the anti-seismic stalls, a task that he delegated to me due to other family issues that made him unable to travel right now.
It is 2000 kilometers away from the city of Buenos Aires, to the small mountain town called Trevelin (in Welsh town of the mill). My son and his wife have decided to live in that place, closer to nature and the beauties that are still enjoyed.
Of course, I took a few days to go to practice my favorite sport, fly fishing, and also to enjoy the company of my lifelong friend who almost 20 years ago also decided to say enough to the big city.
We rented a small cabin on the shores of Lake 1, in the town of Río Pico, another small town further from Trevelin, almost 250 kilometers to the south, towards the narrowness of the cone that represents my country on the world map.
The cabin was not luxurious, we did not need it or want to pay too much money just to eat and sleep, it was enough for us that it was near the water and that it allowed us to enjoy the dream landscapes, all those demands were met by this little alpine and there we went.
Despite the fact that Río Pico is characterized by having a rather harsh climate, this time it behaved decently and except for the wind that firmly punished us two of the three days of our stay in the place, it also rewarded us with sunny and temperate days and clear nights where the milky way shone in all its splendor.
As can be seen in the photographs, everything is wonderful in Patagonia, and in addition to fishing (little actually) we rested and caught up with the friendship and camaraderie that has characterized my relationship with Horacio. We are very different, in character in thought, in attitude, and even in political ideas, but based on mutual respect we have kept our friendship alive for more than 50 years, it is little.
I put some photos of the Andean Patagonian forest, also called the Valdivian jungle so that my new friend that Hive gave me @galberto to see them and maybe contribute something about it.
It is good to appreciate something of nature from time to time and to propose to work in what is possible to mitigate the devastating effects of the various activities of man, the next generations have the same right as we do to observe the wonders of the planet.
La superpoblación, la polución, el calentamiento global son problemas evidentes y acuciantes de nuestro planeta, por eso encontrar y disfrutar de lugares donde esos inconvenientes apenas han provocado cambios, es un regalo que debemos aprovechar mientras podamos.
En esta semana que concluye tuve que viajar por un tema importante que me delegó mi hijo, fui a supervisar la nivelación de un lote y la construcción de la platea antisísmica, tarea que me delegó debido a otros temas familiares que hicieron que el no pudiera viajar en estos momentos.
Son 2000 kilómetros de distancia desde la ciudad de Buenos Aires, al pequeño pueblo de montaña llamado Trevelin (en galés pueblo del molino). Mi hijo y su esposa han decidido vivir en ese lugar, más cerca de la naturaleza y las bellezas que todavía se disfrutan.
Por supuesto que me tomé algunos días para ir a practicar mi deporte favorito, la pesca con mosca y también disfrutar de la compañía de mi amigo de toda la vida quien hace casi 20 años también decidió decir basta a la gran ciudad.
Alquilamos una pequeña cabaña a orillas del Lago 1, en la localidad de Río Pico, otro pequeño pueblo más lejos de Trevelin, casi 250 kilómetros hacia el sur, hacia la estrechez del cono que representa en el mapa mundial mi país.
La cabaña no era lujosa, no lo necesitábamos ni queríamos pagar demasiado dinero solo para comer y dormir, nos bastaba con que estuviera cerca del agua y que nos permitiera disfrutar de los paisajes de ensueño, todas esas exigencias las cumplía este pequeño alpino y allí fuimos.
Pese a que Río Pico se caracteriza por tener un clima bastante rudo, en esta oportunidad se comportó decentemente y salvo el viento que nos castigó con firmeza dos de los tres días de nuestra estancia en el lugar, también nos premió con días soleados y templados y noches claras donde la vía láctea brillaba en todo su esplendor.
Como se puede apreciar en las fotografías, todo es maravilloso en la Patagonia y además de pescar (poco en realidad) descansamos y nos pusimos al día con la amistad y el compañerismo que ha caracterizado mi relación con Horacio. Somos muy distintos, en carácter en pensamiento, en actitud y hasta en ideas políticas, pero basados en el respeto mutuo hemos mantenida viva nuestra amistad por más de 50 años, lo es poco.
Pongo algunas fotos del bosque andino patagónico, también llamado selva valdiviana para que mi nuevo amigo que Hive me regaló @galberto las vea y quizás aporte algo sobre ella.
Es bueno apreciar cada tanto algo de la naturaleza y proponerse trabajar en lo que se pueda para mitigar los efectos devastadores de las diversas actividades del hombre, las próximas generaciones tienen el mismo derecho que nosotros de observar las maravillas del planeta.
Las fotografías son de mi propiedad excepto las que menciono la fuente.
The photographs are my property except those mentioned by the source.
Héctor Gugliermo
@hosgug
